ENTREVISTA EXCLUSIVA ESPECIAL: LEONARDO PADRÓN

Leonardo Padrón ha obtenido muchos logros en su carrera como escritor, poeta, ensayista, guionista de televisión, cine, y articulista de prensa. Incisivo, mordaz, poeta, conocedor del verbo y la prosa, pero sobre todo inteligente y muy intuitivo, la carrera de este escritor, bien llamado: “El poeta” ha logrado laureles, que van más allá de esos premios colgados en una pared, o colocados apilados en una repisa de madera o mármol. Él ha quedado grabado en la mente y el corazón del colectivo, siendo a mí parecer, el mejor premio o estimulo, que artista alguno, pueda recibir. El capitulo final de su más reciente producción dramática, “La Vida Entera” fue, definitivamente una demostración contundente, clara y precisa de su infinito talento y habilidad como escritor. Hoy a la salida al aire de su programa “Los imposibles” por la pantalla de Venevisión, a las 10 de la noche. Quise entrevistarlo, con el fin de conocer su opinión y expectativas al respecto. Pero fueron más pinceladas, llenas de sinceridad, humildad e irreverencia, las que nos brindó en esta entrevista, donde este redactor, se siente honrado, de haber logrado para todos ustedes.


¿Cómo se siente con el lanzamiento de Los Imposibles?

Expectante. Vale saber si la propuesta, que ha funcionado extraordinariamente en radio y libro, funciona de igual manera en televisión.


¿Es cierto que José Luis Rodríguez, le hizo firmar un documento donde se prohíbe la trasmisión de su programa en el exterior?

Planteado así, suena un tanto distorsionado. Todos los entrevistados son conminados a firmar un release, un documento que autoriza a Venevisión a vender el programa internacionalmente. Es un procedimiento clásico. Lo hacen todas las empresas en este tipo de programas. Y ha habido algunos personajes o managers más reticentes que otros. No es sólo el caso de José Luis, sino de Fito Páez y uno que otro más. Pero estamos en conversaciones promisorias.


¿Satisfecho con los resultados de La vida Entera?

Mucho. La novela tuvo una nobleza extraordinaria. A pesar de haber sido estrenada en una época terrible, rodeada de béisbol, elecciones, cadenas presidenciales y vacaciones navideñas y en el horario no previsto, logró remontar tanto viento en contra y tuvo unos números magníficos. No lo digo yo, lo dice AGB, que tiene el deber de ser más objetivo que yo. Además, en términos de espectáculo, creo que la realización fue de muy alta factura estética, con planos visuales pocas veces vistos en televisión y con inolvidables alardes actorales.


¿Quién ha sido su mejor pareja protagónica?

No suelo hacer rankings de mis parejas protagónicas. El impacto de algunas se va diluyendo con el paso del tiempo. Ana Karina Manco y Guillermo Dávila, por ejemplo, fueron una pareja súper romántica. Mary Carmen Regueiro y Daniel Lugo eran dos grandes actores. Y así. Cada pareja tuvo su encanto. Yo estoy muy satisfecho con la fuerza y la química que hubo entre Jorge Reyes y Anastasia Mazzone.¨


¿Cuál es a su opinión su mejor obra ó novela?

Podría invocarte la misma premisa que en la respuesta anterior. En todo caso, prefiero que el tiempo, el público y la crítica terminen respondiendo esa interrogante.


¿En quien se inspiró o quien fue su motivación para convertirse en escritor?

No hubo un quién, hubo un qué. Y ese qué ni siquiera es fácil de definir. Hubo un momento en que dentro de mí cuajó un destino cosido a las palabras. Un momento en que me atreví a abordar la página en blanco como vía de conocimiento, como forma de perseguir a la belleza y de lidiar con la desazón interior que en todo ser humano habita. Todos tenemos el compromiso de hacerle caso a nuestras ganas. Obviamente, muchos escritores me estimularon silenciosamente desde su maestría y desde sus páginas. Pero esa lista es larguísima.

¿Ya tiene programada su próxima novela?

-Carcajadas-¡Para nada! Tengo programado un requerido descanso en materia dramática. Porque trabajo me espera, pero en otras esferas.

¿A que actriz o actor no ha tenido en el elenco de sus producciones y quisiera tener?

Fíjate que en esta novela me saque la espinita con, por lo menos, tres actores que quería tener en algún trabajo mío: Crisol Carabal, Marlene de Andrade y Basilio Álvarez. Y los tres hicieron un trabajo brillante. Por ejemplo, respeto mucho el trabajo de Iván Tamayo y no hemos aún tenido el chance de trabajar juntos. Esperemos que ocurra más adelante. Pero hay unos cuantos más por ahí.

¿Poner a protagonizar a Roque Valero, fue un acto de irreverencia ó ganas de romper paradigmas?

Fue un acto de justicia actoral. Roque Valero es uno de los mejores actores de este país, posee una verdad asombrosa para encarnar sus personajes. Supongo que ponerlo a protagonizar se lee como una intención de romper paradigmas porque en este país se acostumbra demasiado a privilegiar la estampa física sobre la calidad actoral. Pero Juan Lobo fue todo un éxito como personaje protagónico. Y eso gracias al carisma y el talento de Roque.

¿Qué le agregaría y le quitaría a nuestra TV?

Le agregaría capacidad de riesgo, imaginación, coraje, más respeto al televidente y más ganas de innovar y no apelar con tanta recurrencia a la fórmula del éxito fácil. Le quitaría, de entrada, la prohibición de señal abierta para RCTV, la Ley Resorte, los abismales y patéticos niveles de autocensura, la cantidad de estereotipos que la nutren, la pacatería y el miedo.

¿Es cierto que gana cinco mil dólares por capitulo?

Primero: no gano en dólares, sino en bolívares débiles, que es nuestra moneda oficial. Segundo: permíteme decirte que me parece muy riesgoso que algunos periodistas insistan en publicar los sueldos de la gente del espectáculo, muchas veces son cifras distorsionadas, hiperbolizadas en extremo, y en un país donde la industria del secuestro express florece día a día me parece peligroso que anden ventilando asuntos tan íntimos y delicados. Eso valía antes, o en otras latitudes, pero no en este país tomado por la delincuencia.

¿Quién le colocó el titulo del poeta Leonardo Padrón?

-Ríe de buena gana- Ni idea. En todo caso, sucede que escribo poesía.

¿Viene una cuarta edición de su libro?

Sí. Ya está planteado. Ya se ha convertido en una rutina estupenda que cada temporada de Los Imposibles desemboque en un nuevo libro. Supongo que, como siempre, será a finales de año.

¿Qué entrevista lo ha llenado más y cual ha sido la menos afortunada?

Sin ánimos de sonar diplomático: son innumerables las entrevistas que me han llenado. En esta temporada, para mi son particularmente una joya la de Mario Vargas Llosa y la de Fito Páez. ¿La menos afortunada? Esperemos que transcurra la temporada y hablamos.

En una frase:

Amores de fin de siglo: Mi primera telenovela autoral y mi mejor nostalgia.

Amantes de luna llena: Un homenaje a las bellezas naturales de este país.

El país de las mujeres: Un tributo personal a las mujeres venezolanas.

Cosita Rica: Mi novela más comprometida.

Ciudad Bendita: Un proyecto feliz y afortunado.

La vida entera: Mi última gran satisfacción en televisión, una exploración del universo de la culpa y el perdón.

Cuerpos Clandestinos: Mi unitario más internacional.

La Madame: Un paseo entrañable por los personajes de la nocturnidad.

Cuando vimos actuar por primera vez a Anastasia Mazzone, no dudamos en apostar por su talento, y fuimos los primeros en vaticinar que se convertiría en una heroína de novela ¡No nos equivocamos! Su debut como protagonista fue muy acertado y dejó claro que ella llegó para quedarse en el medio artístico venezolano, para luego traspasar fronteras y convertirse en toda una figura internacional. Por ello aproveché esta oportunidad para preguntarle al escritor de su novela, y pareja en la vida real, su opinión al respecto sobre Anastasia Mazzone y Kotufa.

¿Tiene planes de boda con Anastasia Mazzone?

Tengo planes de vida con Anastasia. Me parece pavoso andar hablando de boda en una vitrina tan pública como esta.

¿Cómo se siente con el éxito que obtuvo como protagonista?

Feliz. No la tenía fácil, básicamente por su relación personal comigo. Muchos francotiradores apostaron a su fracaso. Pero desde el primer capítulo demostró que era perfecta para interpretar a Kotufa.

Conociendo más a:

¿Un libro? Todos los libros de Juan Carlos Onetti.

¿Un momento? El nacimiento de mis hijos.

¿Un lugar? El puente Charles en Praga.

¿El día o la noche? El día con su longitud y su nitidez.

¿Una flor? Girasoles. Son pura vehemencia.

¿Un recuerdo? La extraordinaria plenitud de mis años de universidad.

¿Una canción? With or without you, de U2.


Leonardo Padrón: ¡Que arrecho eres!
Después de haber visto el capitulo final de su novela “Ciudad Bendita” muchas personas-entre las cuales me incluyo-pensamos, que sería difícil, para el escritor, superarse a si mismo ¡Y nos equivocamos! Lo logrado por Leonardo Padrón, en este reciente capitulo final de su obra novelada “La Vida Entera” nos demostró que este señor no conoce limites. Magistral y sin desperdicio, tanto su pluma, como las actuaciones de la mayoría de sus personajes. Mención aparte merecen: Gustavo Rodríguez, ¡Sencillamente insuperable! Carlos Mata, Lourdes Valera, Basilio Álvarez, Héctor Manrique, Beatriz Valdez-quien a pesar de no dar físicamente con el esteriotipo del personaje, lo dio actoralmente, dejando claro que ella es una señora actriz-Crisol Carabal, Gledys Ibarra, Carlos Cruz, Tania Sarabia, Roque Valero, Daniel Bascopé, Elba Escobar, Carlos Montilla, Marisa Román, y Luis Geronimo Abreu, entre otros.

La pareja conformada por Jorge Reyes y Anastasia Mazzone, cumplió su cometido y los mostró no solamente en toda la plenitud de su belleza, sino que brindaron verdad, carisma y química, en una dupla que traspasó la pantalla chica, dejándonos enamorados del amor y del género. Ese que maneja como pez en el agua Leonardo Padrón. Al finalizar el capitulo de La Vida Entera, varios mensajes de texto recibidos, al igual que llamadas telefónicas, donde la misma expresión que coloqué en el titulo de esta nota, se repetían constantemente, me hicieron atreverme, a colocarla como tal, y reiterarle a él, y a esos señoras y señores de la actuación en nuestro país, nuestro más profundo respeto y admiración por el espectáculo brindado, donde las lagrimas, la risa, y los sentimientos encontrados, nos llevaron a un final sin desperdicio.